Chihuahua, Chih. 28 de Marzo del
2017
EDITORIAL:
“LO QUE OTROS CALLAN”
MOSCAS
Y ARAÑAS
Guillermo
Liebnetch al igual que otros Cooperativistas, participaron en los Movimientos Obreros
de finales del Siglo XIX y para 1898 ya existían 15 mil Coopertivas con más de
25 millones de socios .
Para explicar que
la única salida que tienen las Masas de Trabajadores, es la unión y esfuerzo
para formar sus propios Medios de Producción y Financiamiento, hago este
relato, exponiendo el ambiente que padecemos.
Todos conocemos a
un insecto repugnante: la araña, de vientre redondo y peludo que vive en
rincones obscuros, tejiendo sus mortíferas redes, en las que halla la muerte la
pobre mosca ingenua que cae en ellas.
Acecha inmóvil, desde su rincón a su presa, cuando ésta llega a sus dominios. La
araña espera que la inocente mosca, empujada por el hambre, se acerque en busca
de alimento La mosca llega pronto y buscando comida, se agita en todas
direcciones y tropieza con la fatídica red; se enreda asustada y pugna por
salvarse, pero está perdida. La araña sale con mirada sanguinaria y presta sus
patas, acercándose a su presa, no necesita apurarse, sabe que la mosca no tiene
escapatoria. La mosca trata de escapar y agota sus fuerzas en vanos intentos
¡todo es inútil! La red la aprieta y exhausta la mosca está a merced de su temible
vencedora: la araña, que con sus patas la estrangula. Luego chupa la sangre de
su víctima varias veces hasta saciar su apetito. La deja moribunda, luego
regresa y chupa más sangre. La deja que se reponga y luego extrae la última
gota de sangre. La araña por fin aspira la vida de la víctima y su fuerza y la
abandona, cuando no puede quitarle más. Entonces, la mosca muerta, seca, ligera
es arrojada de la red. Cualquier ráfaga de viento se la lleva. Todo ha
terminado. La araña satisfecha contenta de sì misma y del mundo, cree que las
personas decentes no viven mal, a fin de cuentas…
Esa mosca a la que
roban la vida, a la que matan, exprimen, y de cuya sangre viven, son los trabajadores
de la ciudad y el campo. Son los escritores, artistas, los obreros
industriales, mujeres oprimidas y débiles que no se atreven a exigir sus
derechos. Son los ciudadanos víctimas del militarismo y estado policial con su
impunidad imperante, que con el pretexto de combatir la delincuencia, roban,
extorsionan y matan. Moscas, también son los inquilinos que son arrojados por
los Bancos, arrendadores y usureros. Los que trabajan por su País con su
producción, inteligencia, corazón y fuerza viva. como los Mexicanos, que se les
da el derecho de morir dócil y sumisamente, acobardados, en la miseria,
mientras que con su sangre, sudor y lágrimas,
trabajo e inteligencia nutren a los explotadores, al Gobierno, a la oligarquía,
a la burocracia y los opresores, es decir a las repugnantes arañas. Son los
especuladores, extranjeros que se roban nuestros recursos, el alto Clero, los
Diputados y Senadores, así como funcionarios; los empresarios que obligan a sus
trabajadores a cobrar y depositar en los Bancos sus sueldos.
Arañas, como el
IMSS que obstaculiza las jubilaciones, los que se rìen de nuestros sufrimientos
y quitan las conquistas sociales.
Fijémonos en las
redes que nos tienden estas arañas, veamos sus ardides y sobre todo UNÀMONOS EN
COOPERATIVISMO, pues por separados somos muy débiles para romper las telarañas
que nos envuelven.
Rompamos las
cadenas que nos traban, arrojemos a nuestros enemigos de sus guaridas y hagamos
llegar la luz de la educación, para que esa inmunda peste no pueda continuar en
las tinieblas ¡ay moscas, moscas, si quisiéramos! ¡si quisiéramos seríamos
invencibles!
Cierto que las
arañas, son fuertes, pero son pocas; cierto que las moscas no tienen peso ni
influencia, pero su número es infinito; son la vida y si quisieran y se unieran
el mundo sería suyo, y de un solo aletazo destruirían todas las redes que las
envuelven, y las hacen perecer de hambre. ¡Aprendan, pues a querer!
BICHOS HUMANOS.- Sin
unión, no puede existir fuerza ni espíritu público.
Atentamente
César Augusto Gutiérrez
Fierro
E Mail
augu_gtz@hotmail.com
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