El 28 de julio de 2010 por medio de la Resolución 64/292, en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), se reconoció el derecho humano al agua y al saneamiento como esencial para la realización de todos los demás derechos humanos.
De tal suerte que el suministro de agua potable y un saneamiento saludable y limpio, debe ser accesible y asequible para todas las personas del planeta.
En Chihuahua capital, la Asamblea Popular Comunitaria, retomó el tema denunciando que el abasto de agua potable para casi un millón de habitantes de la capital del estado está en riesgo por la sobre-explotación de los acuíferos Sauz-Encinillas, Tabalaopa-Aldama y Chihuahua-Sacramento.
Tema del que poco se habla.
Con más de 20 años de experiencia en el tema, el Ing. Fernando Flores Madrid representante de la Asamblea Popular Comunitaria, viene avizorando que los conflictos por el agua en el estado de Chihuahua, seguirán a la orden del día.
Es un conflicto añejo el que existe por el agua en el estado de Chihuahua, resurgió con claros tintes electorales y partidarios entre el estado y la federación, lo anterior sin negar la gravedad de la problemática por la sobreexplotación de los mantos freáticos.
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