Por: Asamblea
popular Comunitaria
A raíz de la lucha y
defensa por mantener libre el camino vecinal paralelo a la caseta de cobro
Sacramento, al norte de la ciudad de Chihuahua, desde el pasado 10 de abril, la
Asamblea Popular Comunitaria (APC), ha venido jugando un papel más importante
dentro de las organizaciones y movimientos sociales en Chihuahua.
Su presencia no sólo
llegó a nivel del estado de Chihuahua, sino que se dio a conocer a escala
nacional.
Casi por cerrar el mes de
septiembre, hemos logrado 5 meses completos de mantener abierta la brecha. Nos
ha costado sangre y dinero, así como demasiado esfuerzo. Seguimos de pie, con
la fuerza y el ánimo por delante para mantener liberada la brecha “Digna
Libertad”.
Del mismo modo, la
importancia y presencia de la Asamblea Popular Comunitaria al interior de las
más de 36 comunidades alrededor de la caseta Sacramento, han hecho que se
incorporen otras demandas y problemáticas de la región.
Sobre sale la defensa y
lucha por el agua, en donde, además de las denuncias y demandas en contra de la
privatización, venta y lucro del vital líquido, por particulares y empresas
como la Coca-Cola, se han comenzado las gestiones necesarias con la Junta
Central de Agua y Saneamiento (JCAS), para impulsar una solución comunitaria al
problema del desabasto de agua en las comunidades.
La Asamblea Popular
Comunitaria, desde su presencia en las comunidades a partir del 10 abril, tiene
claro que los accidentes mortales (entre
enero y marzo) derivado del cierre y boicot de los caminos y rutas
vecinales alternos a las peligrosas “Curvas del Perico”, por parte, de la
administración de María Eugenia Campos, a nivel municipal y Javier Corral,
desde el gabinete estatal, a principios de año, están relacionados con el
desabasto, privatización y venta del agua de las comunidades en la región, del
mismo modo que, con el abandono de políticas públicas en salud, educación,
alimentación, seguridad, por mencionar los de mayor relevancia para la
convivencia humana.
Todo como parte de la
política de abandono al campo y miseria para los sectores productivos del
estado no solo de Chihuahua, sino del país entero, como forma de seguir los
lineamientos y exigencias de los organismos internacionales como el Banco
Mundial (BM), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y La Organización de las
Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), por mencionar de
los más nombrados.
Debido a lo anterior y bajo
un nuevo escenario político, tanto a nivel local como nacional, posterior al 1º
de julio, y con una “renovada” legislatura la Asamblea Popular Comunitaria,
logró dejar su sentir, desde el sábado 1º de septiembre cuando entró en funciones
la LXVI Legislatura del estado de Chihuahua.
No solo a través de los
gritos, silbidos y “uleros” que se dieron en el lugar, en contra de diputadas y
diputados que han legislado en contra de los intereses de las clases
trabajadoras y sectores populares, sino con propuestas y herramientas jurídicas
como fueron la Propuesta de Proyecto de Decreto para la reducción del 60% de
las dietas de diputadas y diputados (3 de
septiembre); propuesta de Proyecto de Decreto para la creación del Centro
de Cooperativas en Estado de Chihuahua (11
de septiembre); propuesta de Decreto para le generación de un Mercado
Estatal de Productores (MERCOMUN) (17 de
septiembre); todas y cada una promovidas desde la Asamblea Popular
Comunitaria a través de Cesar Augusto Gutiérrez, Presidente del Consejo Estatal
de Solidaridad al Senecto A. C. (CONESSEN) y la Unión Estatal Para el Manejo de
las Asistencias Sociales A.C. (UNE-MAS).
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