A primeros de
enero, Chihuahua capital.
¡No a los Gasolinazos!
Por: Iván Tarín
El pasado sábado 7 de
enero se llevó a cabo una marcha mitin en contra del primer gasolinazo del año.
El contingente salió a las 4:00PM, desde la glorieta y estatua de Pancho Villa,
en el cruce de las avenidas Universidad y División del Norte, para desembocar
en el centro histórico de la ciudad. La iniciativa surgió como respuesta de
indignación social ante el desalojo de parte de las policías de Maru Campos y
Javier Corral, a la toma de las instalaciones de Pemex en la salida a la ciudad
de Delicias, que se mantenían desde el lunes 2 de enero, principalmente por
barzonistas y transportistas disidentes a Corral y su también política
privatizadora.
La noticia del alza a
los precios de las gasolinas resultó una bomba política. Aglutinó un gran
cúmulo del descontento social latente a las políticas neoliberales en el país,
no sólo en nuestro estado. Importantes contingentes de mujeres y hombres se
solidarizaron a quienes con mayor fuerza impusieron la liberación de casetas,
el bloqueo de carreteras y oficinas así como las demás acciones que surgieron
en oposición al descaro de quienes firmaron el Pacto Por México y las Reformas
Estructurales.
En Chihuahua el fulgor sobrevino
desde el primer día hábil del año, cuando una convocatoria en las afuera del
estadio de béisbol Manuel Almanza, concurrió realizar una Caravana en Contra del Gasolinazo, que desembocó como apoyo afuera
de las instalaciones de Pemex. Resalta decir, que en el lugar ya se encontraban
las disposiciones de Pemex tomadas, principalmente por la parte de los
barzonistas disidentes que no confiaron del todo en el gobernador Javier Corral.
Conforme transcurrió el tiempo la solidaridad, el apoyo y la suma de las y los
chihuahuenses cansados de las políticas neoliberales de los gobiernos recientes
creció. De tal suerte que Maru Campos, Javier Corral y sus demócratas fueron
perdiendo la paciencia prometida en campaña y obligados por la clase
empresarial ordenaron el desalojo tanto de las casetas como de las
instalaciones de Pemex.
Desde entonces han
estado surgiendo iniciativas de descontento y empacho social, tanto a nivel local,
estado y país en general. Algunas son más de corte ciudadano y llamadas independientes, mientras que otras surgen
desde las instituciones, partidos y aparatos del Estado, pretendiendo redimir y
reburujar las cosas para nuevos alientos, entre tanto, las hay también las de
corte substancial y antisistémico que entienden que el problema es más
estructural y se explican desde el viejo relato de la lucha de clases como el
motor de la historia.
Es el caso de Carlos
Loya representante y militante de FEDECO, entrevistado precisamente durante la
Marcha-Mitin del sábado 17 de enero, en la Plaza de Armas, quien reflexionó
sobre los difíciles inicios del 2017. Dentro del marco de las protestas en
contra del gasolinazo, explicó parte de los orígenes y consecuencias del
Neoliberalismo en México. Las y los mexicanos seguimos pagando las
consecuencias de los errores del gran capital, fue una de las ideas que precisó,
uno de los principales promotores en los impulsos por la construcción de la
Asamblea Dominical del Retén Ciudadano. Finalmente, parafraseó el mensaje de las
y los compañeros zapatistas de Chiapas.
¡Por un mundo mejor, en
donde quepan otros mundos!
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